Agradecimientos

Karolien Notebaert

En mi caso particular, la época de preguntar «por qué» no terminó, en realidad, cuando cumplí cinco años. De hecho, fue empeorando y me empujó hacia las ciencias, donde me permitían preguntar por qué y cómo indefinidamente. Con cada respuesta surgían otras diez preguntas más, era una historia interminable y enigmática, mi zona de juegos. Paradójicamente, jamás pensé que acabaría escribiendo un libro sobre la peculiaridad de no formular las preguntas por qué y cómo. Un libro sobre el mindfulness, un libro simplemente sobre ser, sin más. Un libro sobre dejarlo estar. Los Beatles tenían razón.

Entonces, ¿dónde entra en escena la ciencia? A través de la (neuro)ciencia descubrí que el mindfulness es una forma de dominar las emociones, los pensamientos y los sentimientos, sin tener que hacer un esfuerzo. Cuanto más leía e investigaba acerca del mindfulness, más me sorprendía la belleza de esta técnica tan sencilla y, al mismo tiempo, tan efectiva. Fue descubrir el gran número de efectos positivos del mindfulness lo que me hizo creer en esta técnica. Como científica, era el paso necesario que tenía que dar para experimentarlo. Y en segundo lugar, el hecho de saber de qué manera actúa el mindfulness en el cerebro ha mejorado mi comprensión notablemente y me ha ayudado a incorporar el mindfulness a mi vida diaria.

Cuando leas la primera parte del libro, espero que la neurociencia del mindfulness tenga para ti el mismo efecto esclarecedor que tuvo para mí. No obstante, como podrás ver en la segunda parte, también existe algo llamado «la ciencia del ser interior», que en última instancia es la comprensión más clara y pura del mindfulness: experimentarlo por ti mismo.

He escrito este libro en colaboración con Peter Creuzfeldt, mi querido amigo y compañero. Peter, además de escribir una gran parte de este libro, me ha inspirado y ha animado enormemente durante el proceso de escritura. Me fascina que a menudo hablemos el mismo idioma, aunque hayamos descubierto el mindfulness desde ángulos diferentes. Nuestras interminables conversaciones han constituido un alimento para mi cerebro y han sido fundamentales en mi proceso de aprendizaje del mindfulness. Peter, es un honor haber podido escribir este libro contigo. ¡Gracias!

No domino el alemán, ya que no es mi lengua nativa, de modo que he escrito mi parte en inglés que después ha sido traducida. Puesto que es un tema muy especializado, he buscado a un científico germano-parlante con un amplio conocimiento del cerebro que, por añadidura, escribe muy bien. Se llama Nils Winter. Reconozco que no siempre ha sido un trabajo fácil, sin embargo, ¡has hecho un trabajo brillante, Nils! Si no hubiese sido por ti, este libro no tendría una lectura tan fluida, clara y precisa. ¡Muchas gracias!

También quisiera darles las gracias a Gregor Albrecht y a Alex Zintler por sus películas (www.gregoralbrecht.com). Ambos habéis superado nuestras expectativas con creces, y estamos orgullosos de haber tenido la oportunidad de trabajar con unas mentes tan creativas. Una mención especial para Lars Richter, que creó muchos de los dibujos que hemos empleado en este libro. ¡Siento mucho respeto por los tres porque representáis jóvenes promesas, cada uno en su campo respectivo! ¡Muchas gracias!

Gracias a todas las personas que habéis leído las pruebas, porque cada uno de vosotros ha contribuido ampliamente a la calidad del libro. ¡Muchas gracias a Martin Schubert, Sascha Schwarz y Delphine Watteyne!

Finalmente, quiero darle las gracias a mi amigo y cómplice Enrico Rück por sus cuidados constantes y su amor infinito durante la redacción de este libro. Tus preguntas son sumamente interesantes, y añadidas a tu apoyo diario y a nuestras fascinantes discusiones sobre la neurociencia y el mindfulness, me han aportado puntos de vista nuevos que han contribuido, sin duda alguna, a la calidad final del libro. Además, nuestras sesiones de meditación conjuntas y nuestras interacciones diarias me han permitido experimentar el mindfulness a un nivel más elevado. Eres una gran fuente de inspiración. Muchas gracias, mi querido amor.

Peter Creutzfeldt

Cuando acabé la enseñanza superior, me tomé un año sabático y me fui a viajar por la India, donde descubrí la «meditación» y aprendí a meditar. En esa época, me identificaba románticamente con el «Siddharta» de Herman Hesse. Al volver, en cambio, mis amigos y mi familia creyeron que había sido captado por una «secta». En 1980, no era muy habitual encontrarse a alguien sentado en el suelo con los ojos cerrados, observando la respiración. Sin embargo, eso me animó más todavía a seguir, y la meditación –y más tarde la idea de que el espacio que se crea con la meditación se puede incorporar a la vida diaria– se convirtió para mí en el mayor descubrimiento de mi vida. Por eso, veinte años más tarde, cuando me convertí en trabajador autónomo dentro del campo del desarrollo del personal directivo, quería que el foco de mi trabajo fuera el mindfulness: ese espacio que se crea con la meditación. Yo mismo había comprobado personalmente la importancia de esta cualidad en mi época anterior, como director ejecutivo. En el año 2000 todavía se seguía considerando el mindfulness como algo extraño y esotérico, pese al éxito de Jon Kabat-Zinn con su programa de reducción del estrés basado en el mindfulness, con sus miles de pacientes en Estados Unidos, y pese a las asombrosas diferencias que descubrió Richard Davidson, de Michigan, entre los escáneres cerebrales de los primeros monjes tibetanos y los de la gente que no medita. Algunos años más tarde, empecé a soñar con encontrar a algún neurólogo en Europa que estuviese interesado en confirmar la aplicación práctica de la meditación o el mindfulness a través de sus investigaciones. El hecho de haber escrito este libro con la joven y talentosa investigadora del cerebro Karolien Notebaert y haber conseguido que este tema llegue a los lectores es un sueño hecho realidad y un privilegio.

¡Karolien, estaría subestimando mi colaboración contigo si te dijera que ha sido «provechosa»! Gracias por acreditar que ambos hemos llegado a la misma comprensión independientemente y a través de caminos diferentes. Y gracias por el privilegio de poder colaborar e intercambiar información contigo, ¡ya que me ha permitido experimentar, corregir y actualizar mis conocimientos científicos!

El libro ha sobrepasado todas mis expectativas con creces en dos aspectos, y para ello ha sido necesario el apoyo de otras personas: las lecturas de prueba, con todas las valiosas impresiones, y las entrevistas con los meditadores que estaban deseando compartir sus experiencias, y cuyos informes personales han permitido que los lectores tengan acceso a este tema. Por ello, quiero dar un caluroso agradecimiento a Raj Bissessur, Fong Chen Chiu, Cord Dismer, Marion y el doctor Sören Fischer, Jutta Häuser, Ursula Leitzmann, Nicole Pindinellos, el doctor Holger Rohde, Enrico Rück, Saskia Schomerus y Tania Seehase. Mi traductor, Samar Nahas, merece una mención especial por su cuidadosa empatía y su talento experimentado, que han hecho mi vida más fácil.

Y por último, ¡nuestro más sincero agradecimiento a Danja Hetjens y a nuestra editora Bianca Labitzke por su incalculable apoyo en la ejecución de este libro!

Bibliografía

PARTE I

1. El proceso ascendente: emociones, pensamientos e impulsos

2. Recompensa o catigo: ¿quién soy?

3. Las reglas cerebrales del rendimiento y la toma de decisiones

4. El mindfulness y mi cerebro. ¿Cómo funciona eso?

PARTE II

5. ¿Qué es mindfulness? Introducción, definición y primeros ejercicios prácticos

6. Principios, mitos y consejos útiles

7. La meditación mindfulness: técnicas

8. Mindfulness en tu vida diaria: la práctica informal

9. Diez pruebas internas para las que hay que prepararse

10. En las empresas. Mindfulness en acción

11. Mindfulness fuera del trabajo: educación, salud, aficiones, deportes y juegos

Epílogo/conclusiones